
Doria Medina llama a renovar el sindicalismo y combatir la corrupción para dignificar el trabajo
¡Que vivan los trabajadores y las trabajadoras bolivianos, tanto formales como informales! ¡Gracias por todo!
Sin ustedes Bolivia no estaría en pie, luchando desde hace dos siglos contra la pobreza y para lograr la prosperidad.
Los bolivianos y las bolivianas trabajamos mucho, más que en otros países en los que, sin embargo, los ingresos son mayores.
¿Qué hace falta? Capacitación y tecnología para aumentar la productividad. No en otra cosa consiste la promoción del emprendimiento.
Los trabajadores y la trabajadoras formales aportan para estar asegurados, pero son maltratados por cajas y seguros que funcionan mal, que tienen mucha corrupción.
Tiene que cumplirse la ley: el que meta la mano a la lata se va a Chonchocoro. Y hay que trabajar todos los días para que nadie abuse a los afiliados.
El Ministerio de Trabajo debe actuar siempre de acuerdo a la ley, sin corrupción.
Al final de su vida los empleados y empleadas no pueden jubilarse porque las pensiones son muy bajas, porque sus fondos de jubilación se usan para financiar al gobierno y no a las empresas.
Un Estado más ligero le hará bien a los jubilados y también a las empresas que podrán obtener fondos más fácilmente.
Hay mucho por hacer. Los trabajadores y las trabajadoras están llamados a participar en el cambio a través de organizaciones sindicales genuinas, que dejen de ser oficinas de un partido político y representen de verdad los intereses laborales.
Con el apoyo de los propios trabajadores el cambio será posible.
Mi compromiso inmediato es parar la inflación de precios, que sé que es su principal preocupación, con un plan para traer dólares al país en 100 días. ¡Así lo haremos!
¡Viva el 1 de mayo!